Cuando llegas a los 90 años, has experimentado muchas pérdidas. Ninguna de ellas es fácil. Sin embargo, en los momentos más tiernos y tristes, es un regalo poder decir adiós.
En este video, un hombre de 90 años se despide por última vez de uno de sus buenos amigos, que resulta ser el perro de su vecino, un labrador de chocolate blanqueado por la edad.
Él y el perro son buenos amigos. Y al perro le encantaba. Le traía galletas todos los días y probablemente disfrutaba cada visita con su novio. Seguro que la echaremos de menos.
Su amo fue lo suficientemente amable como para permitirle acompañarlo en cubierta, a pesar de que es una tarea difícil. Su amor por el hombre es evidente, porque incluso a esta hora lo saluda moviendo la cola, ella está tan feliz de verlo.
Ella pasa sus últimos momentos tumbada en la hierba verde de su patio, con su familia cerca, cuando se acerca a ella. A pesar de su edad, se arrodilla en el suelo para frotar su dulce vientre y mostrarle lo mucho que la ama.
Los días de correr hacia él se acabaron. Parece que ya no puede ponerse de pie. Pero todavía es capaz de levantar la cabeza y logra transmitir con felicidad que él ha venido a ella. Parece agradecida de tenerlo cerca de ella.
Él suavemente le ofrece agua de su mano, tratando de animarla a beber. Ella tiernamente lame el agua de su palma mientras su maestro la acaricia, dándole todo el consuelo que puede proporcionar
Los días de correr hacia él se acabaron. Ya no puede seguir en pie. Pero todavía es capaz de levantar la cabeza y logra transmitir con alegría que él ha venido a ella. Parece agradecida de tenerlo cerca de ella.
Él suavemente le ofrece agua de su mano, tratando de animarla a beber. Ella tiernamente lame el agua de su palma mientras su maestro la acaricia, dándole todo el consuelo que puede proporcionar.