También en su caso la pandemia obligó a parar el reloj y retrasó su inauguración. Ahora, un año después de lo previsto, la capital británica por fin puede presumir de contar con una nueva zona dedicada por completo a la creación. Dieciséis edificios de diseño al servicio de todo aquel que quiera dar forma a sus ideas ¡Sea lo que sea que tenga en la cabeza! Moda, tecnología, artesanía, música…Viajes National Geographic ha estado allí y puede dar fe de que basta con poner el pie en el London Design District para que a uno le entren unas ganas irrefrenables de ponerse a trabajar. No es mal comienzo. Así lo han conseguido.
MÁS QUE UN WORKSPACE
Workspaces hay muchos pero el secreto del Design District está en su capacidad para adaptarse a todas las necesidades, tanto de particulares como de nuevos creadores o colectivos ya consagrados. Por eso, aquí se puede alquilar desde un escritorio a un edificio entero pasando por una sala o una única planta. Todo de diseño, claro está. En total, mil ochocientas personas podrían hacer uso de sus instalaciones cada día… o noche. A su disposición tienen estudios de fotografía, de sonido, impresoras, cortadoras láser, de vinilo… El precio mínimo son cinco libras más IVA por cada pie cuadrado -un pie son 30 centímetros-.
TODOS SUS RINCONES
Lo que ofrece el Design District son espacios cien por cien funcionales pero también llenos de atractivo. ¡No hay dos rincones iguales! Porque el diseño manda en todos los sentidos. Ahí está, por ejemplo, ese patio con árboles en medio de lo que podría haber sido una sala de lectura convencional y que claramente no lo es. Ojo también a esa área de descanso a lo Twin Peaks tapizada en rojo de arriba a abajo o a la disposición en gradas de algunas de sus salas para realizar presentaciones. Y como han pensado en todo tipo de profesionales, también hay espacios diáfanos ansiosos de que alguien los llene de vida.
DISEÑO DENTRO Y FUERA
Las mentes pensantes del Design District tuvieron claro desde el primer momento que su apuesta por el diseño debía ser evidente con solo admirar sus sedes. Los edificios que lo conforman tenían que ser un reclamo en sí mismos. Ocho estudios de arquitectura europeos recibieron el encargo de ejecutar dos edificios cada uno hasta completar los dieciséis que conforman el Design District. Y qué gozada para ellos; tenían carta blanca en cuanto a diseño y materiales. Ninguno sabía lo que estaban maquinando los demás.
CON FIRMA ESPAÑOLA
SelgasCano (con sede en Madrid) y Barozzi Veiga (con sede en Barcelona) son los dos estudios con nombre español que han participado en el desarrollo del Design District. Tras su fachada de aluminio pulido, que varía de tono según la luz del sol, los edificios con sello Barozzi Veiga cuentan con techos altos y grandes ventanales. La apuesta de SelgasCano es por la luz natural y la vegetación; aquí las estrellas son el cristal y el jardín que recorre sus cuatro pisos a través de una serpenteante escalera interna.
PERO NO TODO ES TRABAJAR
En la azotea del edificio C1 -obra del estudio londinense Architecture 00- se encuentra uno de los espacios más atractivos del Design District: una cancha de baloncesto con paredes de cristal e impresionantes vistas que lo mismo se usa para pelotear con los compañeros durante una pausa en la jornada de trabajo como para una sesión de yoga. ¡O lo que se les ocurra! Que la comunidad del Design District también necesita distraerse.
HASTA LA COMIDA Y LA CANTINA SON DE DISEÑO
No podía ser de otra manera: la cantina del Design District también está ubicada en un edificio singular. He aquí la segunda obra del estudio SelgasCano. Su estructura transparente representa el cuerpo de una oruga repleto de plantas y árboles. Funciona como un Foodhall con seis puestos diferentes que -¿cómo no?- sirven comida de diseño. Sus propuestas son el resultado de un estudio creativo previo: Arepas, arroz malayo, platos mediterráneos, focaccias, sandwiches al estilo british y recetas directamente traídas de las calle de Calcuta. Dato importante: la cantina está abierta a todos, aunque uno solo pase por allí como turista.
EN UNA ZONA DE MODA
El Design District se encuentra ubicado en el Sureste de Londres, en plena península de Greenwich y con metro justo en la puerta; la estación más cercana es North Greenwich (Jubilee Line). Apenas a unos quince minutos andando está el famoso Cutty Sark y a solo unos metros, el mítico O2 Arena, que fue una de las sedes de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y ahora alberga multitudinarios eventos deportivos y culturales. He aquí un argumento más para visitar esta zona en continua expansión que en los últimos años se ha puesto muy de moda entre los profesionales más jóvenes de la capital británica. Muchos han fijado aquí su residencia huyendo de los elevadísimos -estos son ‘elevados’ a secas- precios de la ciudad y buscando viviendas de nueva construcción. ¡Ah! Que nadie se marche cuando empiece a anochecer, que a esa hora aparecen las decenas de skaters que también han hecho suya la zona y verlos es un auténtico espectáculo.
